Dark Envelope

Jung, el arte y el aislop

· Lumin

Hace poco estaba leyendo un texto de Jung, el hombre moderno en búsqueda del alma suena muy autoayuda y Viktor Frankl (que me caga) pero no lo es, de hecho solo es una reflexión profunda sobre la inspiración y la creación artistica con muchas brillantinas de psicología profunda.

Algo que se me quedó y el porque de este texto, fue el capitulo en el que habla del artista (o especificamente del poeta) y es interesante leer sus textos pues en su momento cosas que ya son y existen en lo público en esos momentos se estaba forjando, por ejemplo; este dicho/hecho de que todo lo que los artistas hacen tiene que ver con su historia, su crecimiento y su vivir traumatico, no es más que la perspectiva Freudiana intentando de describir y explicar una acción inteligible como lo es el arte, es decir, se hace un uso de categorías y un marco teórico específico para describir este proceso y de esta manera se termina concluyendo que en efecto el artista es un traumado que intenta sublimar sus pulsiones y que así la creación artistica no es más que una representación narcisista, una valvula y una oda a todas las frustaciones y represiones del artista, en otras palabras, es una mecanismo de defensa para lo abrumante que fue la vida de este.

Jung no dice esto, de hecho dice que el arte se divide en dos aspectos, uno visionario y uno vivencial, el vivencial puede estar manifestado de esta manera y puede ser relativo a la individualidad del sujeto, pero el visionario implica un toque de un más allá, implica imágenes psíquicas que son existentes por y mediante el lenguaje así como la mente, implica justamente una visión de algo que esta más allá de la experiencia humana, algo que existe fuera de nostros pero al mismo tiempo que nos atraviesa. Jung aquí como ejemplo habla de obras fantásticas como lo sería Fausto o los Nibelungos, obras que marcan y perfilan toda una cultura, obras que se conocen ahora como clásicos pero que más precisamente son creaciones míticas. La visión y el mito están entrelazados, podría uno decir que uno es forma del otro y viceversa, y creo que esto es lo importante, que el verdadero arte implica un acercamiento a la pleroma, al mar de las ideas inteligible por nostros mismos, algo a lo que Jung se refería como el incosnciente colectivo, es algo que de alguna manera nos rodea y nos hace, es como el aire que le da forma a una montaña o el agua dandole forma a un lago o a un rio.

Sin embargo creo que lo más interesante de esto es que estos lazos, estas visiones que en algún momento y por lo cual tan facilmente escribía an el pasado han desaparecido o no tengo una conexión directa con ellas, sigo teniendo sueños, sigo sintiendolos y viviendolos, pero lo que veía en el día en un estado consciente se ha esfumado.

Tengo una teoría para este problema y es la repetición, la repetición ad nauseam de toda creación, desde los memes más refritos y existentes hasta la literatura y las películas, si algo acaso se ha salvado a sido la poesía, pues es díficil para el egregore (o egregores) repetir aquello que ni siquiera pueden consumir. Y a que me refiero con egregore a dos cosas, a la masa del consumo, es decir, a todos nosotros consumiendo contenido, alimentando el alma o la mente con lo que efectivamente sería comida chatarra y a las tan famosas “““Inteligencias Artificiales”””, que de inteligentes no tienen nada, de artificiales lo tienen todo y ese es el enfasís que quiero realizar, creo que el flujo de las ideas, el mar caotico que es la plemora se la ha hecho una presa o se le ha ido secando lentamente, el artista que iba se echaba un clavado para recibir la visión ahora no puede hacerlo porque el agua no es lo suficientemente profunda, por lo mismo la innovación artística ha disminuido, porque ya no podemos ver, ya no podemos escuchar y creo que cada vez esto será peor, ya no solo se bloqueará nuestro acceso libre a lo innombrable y lo desconocido, sino pues también los íconos y mitos que tendremos serán nada más y mucho menos que un arte absento de toda visión, pues este mundo inteligible no es accesable por un algoritmo, pues no es cuantificable ni cualificable, este mundo no es algo que puedan integrar a sus sets de datos, porque justamente es lo desconocido siendo desconocido, y la interpretación surge del artista siendo artista, sin pensamiento alguno, la forma de la visión es dada por el visionario, por una vida en un proceso y creación artistica, es un arte con alma, y/o con sentido como se le quiera ver, es algo que esta fuera de nosotros y nos guiña el ojo desde un mundo fuera del nuestro, un mundo mítico y simbolico, que termina siendo paradojico pues al mismo tiempo esta plemora es un sinsentido.

Pero lo triste es que el voraz capitalismo, en su estomago hecho una burbuja de algoritmos jamás se dentendra, pues todas estas personas regalandose dinero entre ellas, vendiendo puro humo, saben muy bien que ya pasaron ahce mucho por el punto de no retorno y lo único que queda es seguir deborando hasta explotar y colapsar.

Todos lo sabemos, consciente o inconscientemente y esa elusiva pieza artística esta aún por manifestarse, se debe de sentir real, debe de ser real, ya vendrá, es esa sensación la que existe, ya llegará, pero nunca estando ahí hasta que lo creamos.